Muchas personas están planteándose nuevas formas de negocio debido a la crisis, donde el empleo por cuenta ajena se está volviendo cada vez más escaso. En este contexto comienzan a surgir las opciones de autoempleo como salida a mal momento económico. Se trata de variantes que tienen muchos inconvenientes y dificultades, pero por qué no decirlo, también muchas ventajas a la hora de no tener jefes con quienes discutir y ser uno el responsable de sus propios beneficios.
Está claro que montar un negocio no es algo para nada sencillo y existen muchos trámites legales que solo un experto como los abogados del despacho de Miguel Durán pueden gestionar correctamente para facilitarnos la apertura de nuestra empresa. Los letrados son personas especializadas en este tipo de servicios y nos informan acerca de todos los requisitos que debemos reunir, así como nos ayudan a gestionar los permisos y demás papeles que son obligatorios para poder poner en funcionamiento la empresa.
Hoy queremos aprovechar este artículo para hablaros de un nuevo negocio que se encuentra cada vez más en auge dentro de nuestro país, y es aquel que tiene que ver con la alimentación ecológica, que está reuniendo una gran cantidad de adeptos que buscan primar la calidad de los productos sobre el precio de los mismos y favorecer también que los beneficios de este tipo de comercio se queden en los eslabones más bajos de la cadena de comercio.
Como decíamos, los alimentos ecológicos son mucho más saludables. Se trata de productos que no contienen aditivos seintéticos ni pesticidas o antibióticos. Es por esto también que podemos afirmar que son mucho más sabrosos, ya que se recuperan los gustos originales debido a ser elaborados de una manera más artesanal. Asimismo, son también mucho más nutritivos, ya que contienen unos niveles más altos de vitaminas, minerales esenciales, proteínas, hidratos de carbono o antioxidantes porque los fertilizantes usados son de origen natural.
Además, este tipo de productos como los pesticidas o las aditivos que sí se suelen usar en la agricultura convencional pueden llegar a dañar a medio o largo plazo nuestro organismo, un problema que no tendremos consumiendo productos ecológicos, ya que estos serán asimilados por nuestro cuerpo sin alterar las funciones metabólicas.
Otros de los compradores que buscan también adquirir sus alimentos en tiendas de productos ecológicos son aquellos que respetan mucho la naturaleza. Este tipo de cultivos respetan el equilibrio de la misma y ayudan a su preservación y al desarrollo sostenible. Por ejemplo, entre otras, la agricultura ecológica fertiliza la tierra y pone freno a la desertificación, favoreciendo la retención del agua y sin contaminar los acuíferos. Además, la agricultura ecológica respeta también los ciclos naturales de los cultivos, evitando la degradación y la contaminación de los ecosistemas. Asimismo, se fomenta también la biodiversidad y se mantienen los hábitats de los animales silvestres. Este tipo de agricultura fomenta así (con prácticas también con las rotaciones, los abonos verdes o la ganadería extensiva, entre otros) la fertilidad natural de los suelos y la capacidad productiva del sistema agrario, recicla los nutrientes y los incorpora como abono al suelo para optimar los recursos naturales.
Los animales son otros de los grandes beneficiados con este tipo de agricultura, por lo que muchos amantes de los animales se decantan también por comprar estos productos. La ganadería ecológica potencia el crecimiento de los animales en semilibertad, liberándolos del estrés y dejando que crezcan y se desarrollen a su ritmo, sin sobreexplotarlos. La alimentación de los mismos se hace también de manera natural, con leche de sus madres, pastos de la zona, pienso y forrajes ecológicos que no contienen pesticidas o fertilizantes y transgénicos.
Por último, destacar que este tipo de productos responden a todos los estándares de calidad acogiéndose al Reglamento Europeo 2092/91, por el que se someten a grandes controles e inspecciones durante sus procesos de elaboración, envasado, etiquetado, etc.